Refugio de Cabaña Verónica
En 1961, la entonces Federación Española de Montaña animada por el ingeniero vasco Conrado Sentíes, compró una de las cúpulas artilleras del portaaviones norteamericano Palau que estaba siendo desguazado en los astilleros de Santurce con el objeto de instalarla en Picos de Europa y convertirla en refugio. El lugar elegido fue un pequeño promontorio rocoso, a 2.325 metros de altitud,
Esa es la historia del origen del Refugio Cabaña Verónica situado en el municipio de Camaleño (Cantabria), en las estribaciones del Pico Tesorero, en el Macizo Central de los Picos de Europa. Su nombre proviene del de una de las hijas de Conrado Sentíes, su promotor y artífice. Durante años el estado de abandono lo convirtió en una ruina e incluso sufrió un incendio, llegándose a pensar entonces en su demolición, aunque finalmente se restauró.
Está debidamente equipado para proceder al rescate de montañeros perdidos o heridos; cuenta con un botiquín, una camilla especial para evacuación de accidentados, una emisora de radio y una estación meteorológica de la Red de Parques Nacionales.
Este peculiar refugio-vivac, de tan solo 9 m², es muy conocido entre los montañeros de Picos de Europa al ser, hasta el año 2007, el refugio guardado existente a mayor altura de la península ibérica. Es de recibo nombrar a Mariano Sánchez Madina quien durante 25 años fue su guarda desarrollando toda su labor de una forma desinteresada, sin cobrar un céntimo.
En estos dos enlaces podéis ver grabado en formato Super 8 en el año 1961 el proceso de construcción: